Miike, Bogliano y Du Welz en el 7o día – Cobertura Especial Sitges 2014 –
Llegamos ya al séptimo día de festival, donde nos esperan un buen número de títulos, que a priori, parecen bastante interesantes. La jornada dará comienzo con la co-producción entre España y Argentina dirigida por Damián Szifron «Relatos Salvajes». Película de episodios y un interesante humor negro, interpretado por Ricardo Darín, Oscar Martínez y Leonardo Sbaraglia. Seguidamente, llegará la cinta de terror dirigida por Takashi Miike «Over your dead body», donde el cineasta recupera una de las historias más famosas de fantasmas en la cultura japonesa. Sin apenas tiempo para recobrar el aliento, el realizador francés Fabrice Du Welz, nos traerá «Alleluia», una cinta oscura y malsana entorno al amor, los celos y la lujuria.
Por otro lado, el actor António Banderas, estará presente en Sitges para presentar «Autómata», una cinta de ciencia ficción donde los humanos se verán superados por la inteligencia artificial. La cinta está dirigida por Gabe Ibáñez, responsable de aquel tenso drama psicológico como fue «Hierro».
Desde Sudamérica, hoy podremos ver la argentina «Late Phases», el último y más internacional trabajo de Adrián García Bogliano, que desde un prisma fantástico, nos ofrecerá una intensa trama de suspense y terroríficas criaturas. Y desde Uruguay, Gustavo Hernández, realizador de «La casa muda» (2010), vuelve al festival con «Dios Local», cinta que se divide en tres capítulos, a través de los cuales, se cuenta la letra de las canciones de una oscura banda de rock. Por otro lado, la maratón más gore de la jornada, es la compuesta por la colorista «Eat» de Jimmy Weber, la comedia caníbal «Gravy» de James Roday, y la sueca «American Burguer» de Johan Bromander y Bonita Drake, tres alocadas cintas para una larga noche en el Retiro.
Otras proyecciones interesantes del día, serán las que copen la programación de la sección Brigadoon, con el Especial Imagen DEATH, con diferentes propuestas y la proyección de una serie de cortometrajes entre los que se encuentra «Metamorphose» del madrileño Sergio Morcillo.
COBERTURA SÉPTIMO DÍA DE FESTIVAL
Late Phases. Entretenida pero no termina de definirse (por David Solé)
Después de la dividida acogida que Adrián García Bogliano tuvo hace dos años con su anterior trabajo “Ahí va el Diablo” (2012), con la que aún seguimos dándole vueltas a la cabeza, éste año, el realizador argentino nacido en Madrid, regresaba al festival con una interesante producción a cargo de la compañía estadounidense Dark Sky Films, lo que ha significado un paso importante en su carrera. “Late Phases”, es un producto de mayor ambición y presupuesto, pero decididamente menos personal que sus anteriores trabajos. Por poco que hayas seguido su filmografía, con títulos como “Habitaciones para turistas”, “36 pasos” o “Sudor frío”, te das cuenta que en su último trabajo, (cinta que hemos podido ver hoy en los cines del Retiro) cuesta reconocer a aquel Bogliano gamberro, mordaz e independiente, que hasta la fecha se había mostrado fiel a su manera de hacer cine.
“Late Phases”, es una cinta con un planteamiento interesante, de mejor factura y calidad que los anteriores trabajos del director, una historia que arranca con un guión sólido capitaneado por un notable personaje principal interpretado por Nick Damici (Stake Land, 2010), un tipo ciego veterano de guerra, que cuenta con unos diálogos de acertado humor negro. El problema es que ésta ‘monster movie’ no terminar de arrancar ni decidir el camino a tomar, y se tambalea entre la comedia, el misterio y el horror. Una fusión que no termina de cuajar, y a pesar de varios momentos destacables, donde se presentan los primeros ataques de unos personajes misteriosos, cuando éstos se hacen visibles, no cuentan con la suficiente calidad ni credibilidad para el espectador, y su puesta en escena resulta una parodia un tanto forzada, (eso sí, destacar la original transformación licántropa). Bogliano intenta crear en “Late Phases”, un entorno de serie B de los ochenta, pero naufraga dejando una correcta pero insuficiente cinta a la que se podría haber sacado mayor provecho, de contar con mayor libertad.
Alleluia. Los placeres ocultos del ser humano (por David Solé)
Fabrice du Welz no defrauda con su último trabajo, y sigue aportando al género, su particular propósito de incomodarnos a través de esa intensa mezcla de drama y terror, y de su profundo interés por indagar en el lado más oscuro del ser humano. Ya lo hacía en las perturbadoras “Calvaire” y “Vinyan”, y se recrea con dotes de gran cineasta en “Alleluia”. A través de una historia real y de evidentes conexiones con “Profundo carmesí” o “Los Asesinos de la luna de miel”, el director galo construye una oscura y perversa historia de amor, donde los personajes principales se dejan arrastrar hacia un abismo de crueles necesidades, sexo incontrolable y un romance intenso, que se aleja de cualquier formalidad, recreado por Du Welz, como un macabro tormento de obsesión, celos y placeres ocultos.
El gran trabajo y la perfecta simbiosis entre los actores principales y sus personajes, es una pieza fundamental en el buen desarrollo de la historia que plantea “Alleluia”. El rostro perverso y casi psicópata de Laurent Lucas (actor fetiche de Du Welz), junto al espléndido papel interpretado por una lujuriosa Lola Dueñas, hacen que el morbo brote por si solo en ésta perversa y dañina relación. Fe de ello, son las magistrales secuencias donde el sexo, la sangre y la violencia más extrema, salpican la pantalla de depravación, inmoralidad y libertinaje. En éste apartado, Du Welz se permite el lujo de introducir una macabra secuencia musical, que desconcierta por momentos, pero que finalmente hace alarde de un fantástico y bizarre sentido del humor. Fragmento que dibuja con contundencia, la historia que quería y consigue transmitir Du Welz.
Una obra excelente que hace vislumbrar el regreso del mejor cine fantástico francés, y de unos autores con gran poder para sorprendernos.