Jovenes Ocultos 2: Vampiros del Surf (2008)
A la ciudad surfera de Luna Bay, California, llegarán Chris Emerson y su hermana Nicole, tras perder a sus padres en un accidente de coche, ellos se mudaron a vivir con su excéntrica tía Jillian. En una fiesta a la que han sido invitados, Nicole comenzará sin saberlo una relación con el líder de una manada de vampiros. A partir de ese momento, su hermano Chris tratará de localizar y destruir a la banda de chupasangres antes de que la transformación de su hermana se complete. Para ello, Chris buscará la ayuda de un experto: Edgar Frog (Corey Feldman).
Hace años que se llevaba hablando de la posibilidad de hacer un remake o una secuela de Jóvenes ocultos, una de las pequeñas joyas del cine fantástico de los 80 que fue dirigido por Joel Schumaker, quien hizo todo lo posible por evitar la realización de una secuela propiamente dicha. La apuesta era arriesgada, pero al final, a modo de secuela ‘light’ que cuenta más bien poco con los hechos anteriormente acontecidos, se construye esta historia en la que se percibe esa negativa a asociarla con el film de 1987 a pesar de la evidencia. Un detalle a recalcar que demuestra lo dicho, es la participación del hijo de Sutherland, Angus Sutherland, quien a pesar de interpretar idéntico papel que su padre en el film, no aparece referencia alguna cuando hubiera sido más que normal que éste fuera descendiente de David (Kiefer Sutherland, el líder de los vampiros en el original). Corey Feldman, es el único que repite su papel de Alan Frog, algo más crecidito pero con su mismo cometido. A pesar de todo, el film que dirige P.J.Pesce (Abierto hasta el amanecer 3) mantiene en cierto modo el espíritu del film original.
El film, notablemente inferior al que en su día reuniera a Corey Feldman, Corey Haim, Jason Patrick y Kiefer Sutherland, se muestra entretenido y gracioso en determinados momentos, como vaticina la escena que abre la película, con el grupo de vampiros surfistas enfrentándose a un Tom Savini de afilados colmillos, una simpática escena que muestra algo del escaso gore que posee la cinta. El desarrollo del film es similar aunque todo ocurre demasiado rápido, y como era de esperar, no contiene escenas tan memorables como la de los gusanos o la de la vía del tren, ni frases tan buenas como la que cita el actor Corey Haim, «Mi propio hermano se ha convertido en un vampiro de mierda, ya verás cuando mamá se entere».
Por lo demás, el film posee un ritmo alto que no permite que caigas en el aburrimiento y aguantes hasta el final, donde nos espera un guiño entre dos de los protagonistas de la primera, Corey Feldman y Corey Haim, amigos en la original y que aquí son enfrentados pretendiendo dar comienzo a una tercera parte, que esperemos no se produzca por el bien de la saga. Lo positivo es que esta secuela, abra el gusanillo a los que todavía no hayan visto el film del 87 para hacerlo.
[youtube]PqwoQPosIvM[/youtube]