Retratos del Más Allá (2008)
Cabía suponer que para el fotógrafo Ben (Joshua Jackson) y su reciente esposa Jane (Rachael Taylor), el nuevo encargo que aquél recibe, una lucrativa sesión fotográfica de modas en Tokio, sería una mezcla de luna de miel y trabajo. Cargados con tan exótica oportunidad profesional y las ilimitadas posibilidades de un nuevo matrimonio, Ben y Jane llegan al Japón. Pero mientras circulan por una carretera de montaña que conduce al Monte Fuji, su nueva vida juntos se detiene de forma accidental, literalmente. Su automóvil arrolla a una mujer que estaba de pie en medio de la carretera y que se había materializado de no se sabe dónde. Al recuperar la consciencia después del accidente, Ben y Jane son incapaces de hallar rastro alguno de la muchacha que Jane cree haber golpeado con el coche.
Nos hallamos ante un nuevo remake asiático que viene a englosar el gran número de ellos, desde que empezase esta imparable fiebre de copias que normalmente ofrecen una baja calidad. Retratos del más allá, no es una excepción y no está a la altura de la original Shutter (2004) uno de los mejores títulos del panorama asiáticos de terror de los últimos años, que fue dirigido por los tailandeses Banjong Pisanthanakun y Parkpoom Wongpoom. No obstante, el film realizado por el japonés Masayuki Ochiai muestra buenas intenciones dando como resultado una entretenida película, aunque como siempre la pregunta es evidente. ¿Era necesaria la realización del remake de un film redondo, que como todos los asiáticos, guardan su mejor baza en las oscuras leyendas y creencias espirituales que posee su cultura? Un elemento de una fuerza especial que dificilmente puede ser trasmitida en un remake occidental.
Puede ser que el film funcione algo mejor por el hecho de ser realizado por un director japonés, alguien que comparte esas leyendas orientales y que enfoca la historia de ésta nueva visión de una manera más cercana a esa particular cultura. Masayuki Ochiai, quien dirigidó en 2004 Infection (Kansen), un film de posesiones y líquidos verdes en un hospital, de entrada, no construye un insulso calco que repase plano a plano las escenas de la original, sino que utiliza la trama construida por los directores tailandeses para americanizar ligeramente la historia, como hiciera Takashi Shimizu en su propio remake de La maldición (The Grudge, 2004), ambos situaban la acción en Japón, lo que hace algo más creíble determinadas situaciones que aquí y según nuestra cultura no pegarían para nada.
Como siempre en estos casos, las comparaciones son inevitables, y más ante un original en el que la fuerza argumental y el poder visual que poseen las escenas más aterradoras son realmente buenas. No pasa lo mismo en Retratos del más allá, donde las escenas, digámos, más esperadas, no ofrecen ese sobrecogedor encanto que marca la diferencia en este tipo de películas. Una muestra de ello es la escena del cuarto de revelado, aterradora en el film original, y simplemente curiosa en ésta nueva versión. Aún así, el film se torna entretenido, lo que permite llegar hasta el final, donde la gran sorpensa de la trama en la tailandesa Shutter, aquí no solo es esperada, sino que el director no se arriesga y no introduce nada nuevo que pueda soprender u ofrecer algo nuevo a la historia.
Joshua Jackson y Rachael Taylor, son los encargados de protagonizar a la pareja que sufre éstas apariciones, realizando un trabajo aceptable aunque algo lineal, del que salen airosos sin ofrece demasiadas florituras.
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