Skyline (2010)

Allá por 2007, se dio a conocer el primer trailer de Alien vs Predator 2, dirigida por unos desconocidos Hermanos Strause.

Aquel primer avance prometía lo que todo buen aficionado a la saga “Aliens” o “Predator” deseaba (luchas en la ciudad, ejercito, el predalien…) y acabo convirtiéndose en la mayor decepción para los aficionados al cine de terror que se recuerda: Una película vacía, con actuaciones risibles, guión absurdo y una absoluta penumbra que impedía disfrutar de lo poco salvable del film, los alienígenas.

3 años después, en este casi extinguido año 2010, ya podemos considerar a los Hermanos Strause como los mejores directores de trailers de todo Hollywood, o, diciéndolo de otro modo, unos auténticos expertos en vender humo.

Y todo ello con solo dos films a sus espaldas, todo un record.

El argumento se ocupa de cómo Elaine y Jarrod viajan hasta Los Ángeles para visitar a Terry, el mejor amigo de Jarrod, que se prepara para celebrar su fiesta de cumpleaños.

Tras la celebración la pareja se queda a dormir en el ático de Terry, pero en mitad de la noche se despiertan debido a extraños ruidos y luces muy brillantes. Cuando Jarrod se acerca a la ventana, la luz le deja cegado y aparentemente comienza a tomar control sobre su cuerpo. Poco después descubren que una raza extraterrestre ha aterrizado en la Tierra con el objetivo de cazar y destruir a los humanos. Elaine, Jarrod, Terry y algunos personajes más relacionados con ellos tendrán que intentar sobrevivir por todos los medios que puedan.

Tras este argumento, quizá demasiado poco original, se esconden algunos de los diálogos más sonrojantes escuchados recientemente en una sala de cine. Tras acabar la proyección uno no puede dejar de preguntarse si ha visto los mejores 90 minutos de comedia del año o las tomas falsas de «Independence day».

Los actores… bueno, deben de tener muchos contactos con los padres Strause o los amigos de los Strause o con el perro Strause porque si no es incomprensible como un profesional puede expresar menos cuando realmente el film gira en torno a ti, ya que la intención de la película es dejar caer el peso narrativo sobre los personajes y en sus decisiones para salir indemnes de la invasión extraterrestre.

Lo único minimamente destacable del metraje es la comprobación de la evolución que han sufrido los efectos digitales, cada vez más conseguidos aun contando con un bajo presupuesto (aunque el diseño de los invasores esta claramente inspirado en los “calamares” de Matriz y los “cabezones” de Independence Day).

Sin embargo mientras no aparece en pantalla ninguna luz azul, es inquietantemente imposible mantener los ojos abiertos ante tal desarrollo de los acontecimientos.

Por si todo esto fuera poco, los directores se guardan una sorpresa para el final que ya termina por desatar la más oculta de las carcajadas.

Lo mejor: Solo dura unos escasos 80 minutos

Lo peor: Todo lo que acontece en esos 80 minutos