La Bruja (2015)

Nueva Inglaterra, siglo XVII. Una familia trata de salir adelante en medio de un entorno áspero. Sin embargo, algo oscuro parece acecharles: un bebé desaparece en un abrir y cerrar de ojos, la cabra empieza a dar sangre en vez de leche… y todos temen que les hayan maldecido.

The Witch es una película oscura, pero es una delicia visual. Es de esas películas que te entran por los ojos, te atrapan, y un solo fotógrama puede dejarte embelesado durante un instante. Los tonos grisáceos de su fotografía provocan cierta calma en el espectador, pero esto dura poco, ya que entra en conflicto con su otra gran virtud; su banda sonora. Cada escena, cada momento importante del film posee un elemento sonoro que genera la emoción que el director quiere provocar en el espectador, ya sea tensión, terror, desasosiego… Desde el minuto uno, eres consciente de que la música y los efectos sonoros poseen un peso primordial dentro del film, por ejemplo, en ese plano abierto en el que la familia se adentra en el bosque, siendo exiliados por su comunidad.

Pero no todo es perfecto, y es que The Witch adolece de una falta de ritmo importante, hecho que si el espectador carece de cierta paciencia, puede provocar que desconecte de la trama y no vuelva a ella, pierda el interés. Es probable que este ritmo pausado sea un hecho intencional por parte del director, pues esto puede llegar a generar una tensión que junto con los efectos sonoros anteriormente mencionados, provoque el malestar que se presupone debe provocar la cinta. En cualquier caso, superado el primer tercio del film, el riesgo de desconexión desaparece y The Witch comienza a ser muy disfrutable.

Las interpretaciones son muy destacables, haciendo hincapié sobretodo en la relación padre e hija, que va evolucionando a lo largo de la trama, hasta llegar a un desenlace atroz que no dejará a nadie indiferente.

The Witch es una gran película, pero tiene el handicap de que pueda no gustar al gran público, debido a todos esos elementos que posee que le acercan mas al cine independiente.  Claro que juega en su favor la potencia de sus imágenes, sobretodo hacia su segunda mitad, donde el color rojo sustituye ese gris que da vida al film en sus inicios.  También ayuda que la religión y las supersticiones sea el tema principal de su trama, un tema siempre controvertido que da buenos resultados cinematográficos.

En definitiva, The Witch es de esas películas que o amas u odias, no es para todo el mundo, pero si te gusta el cine fantástico, no puedes perder la oportunidad de verla y juzgarla por ti mismo. Y recordad que no debéis adentraros en el bosque…

Título original
The Witch
Año
2015
Duración
87 min.
País
Estados Unidos Estados Unidos
Director
Robert Eggers
Guión
Robert Eggers
Música
Mark Korven
Fotografía
Jarin Blaschke
Reparto
Anya Taylor-Joy, Ralph Ineson, Kate Dickie, Harvey Scrimshaw, Lucas Dawson, Ellie Grainger, Julian Richings, Bathsheba Garnett, Sarah Stephens, Jeff Smith
Productora
Coproducción USA-Canadá-Reino Unido; A24 / Code Red Productions / Pulse Films / Scythia Films / Rooks Nest / Maiden Voyage Pictures / Mott Street Pictures

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Jorge Manrique

@jorgemanrique_

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